Alternativas financieras son urgentes para acelerar estrategias de bajo carbono en el contexto local y cumplir el Acuerdo de París

En América del Sur, Proyecto Urban LEDS apoya a ciudades colombianas y brasileñas en la estructuración de proyectos climáticos

18 de Dic de 2018

Acciones de bajo carbono en movilidad urbana, deven priorizar e integrar peatones, ciclistas y usuarios de transporte público.
  • Ante la urgencia por la acción climática, las ciudades necesitan seguir trabajando para desbloquear la aceleración de estrategias de bajo carbono.
  • En América del Sur, Proyecto Urban LEDS apoya a ciudades colombianas y brasileñas en la estructuración de proyectos climáticos financiables para ampliar la ambición de los gobiernos locales.

 

Con el cierre de la 24ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP24), el último día 14 de diciembre, la presión del tiempo para una acción efectiva en el combate a las consecuencias del cambio climático, ha sido cada vez más urgente. Los datos presentados por el Global Carbon Project durante la conferencia, que concluyó el viernes en Katowice, en Polonia; revelaron que las emisiones de CO2 crecieron 2,7% en 2018, con respecto al 2017, año en el que las las emisiones crecieron un 1,6%.

 

Esta alta en las emisiones muestra que la ventana temporal para revertir el calentamiento previsto por el Acuerdo de París está cerrando y refuerza la necesidad crítica de acciones rápidas y urgentes por todos los países partes del Acuerdo. Los datos acentúan el sentido de urgencia al asunto que también fue destacado en el último Informe Especial del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC). En el, 195 gobiernos afirman, con base científica, que un escenario de Calentamiento Global de hasta 1,5° C por encima de los niveles preindustriales, es el camino que necesitamos seguir para evitar consecuencias devastadoras del impacto del cambio climático. El documento destaca que las metas estipuladas por el Acuerdo de París no son suficientes para limitar el calentamiento global a 2 ° C, mucho menos a 1,5 ° C y, cuanto más tiempo llevamos a modificar este escenario, mayores los impactos climáticos y más caras serán las soluciones.

 

En su conclusión, la COP24 adoptó oficialmente el Programa de Trabajo del Acuerdo de París (PAWP), reconoció las referencias del Informe Especial del IPCC de 1,5°C e invitó a los países a construir sobre el espíritu y los resultados de los Diálogos Talanoa ampliar la ambición de sus Contribuciones Determinadas Nacionalmente (NDC). A lo largo de 2018, las regiones de América del Norte y América Latina fueron testigos de la celebración de encuentros – Diálogos Talanoa, la Cumbre de Acción Climática Global (GCAS), la Semana Climática de América Latina y el Caribe (LACCW) – para ampliar la ambición de los países en relación con sus metas nacionales, con la participación de múltiples actores. Fue la representación de esfuerzos de todos los niveles de gobierno, e instituciones no gubernamentales, para acelerar acciones de combate al cambio climático.

 

Conectada a esas discusiones, iniciativas internacionales promovidas por ICLEI contribuyen directamente a involucrar a gobiernos locales en los esfuerzos para promover acciones para disminuir las emisiones de los gases que provocan el calentamiento global y adaptarse a los impactos que ya se pueden sentir. Desde el 2012, ICLEI América del Sur ha apoyado a ocho ciudades en Brasil, por medio del proyecto Urban-LEDS, en la construcción de un marco técnico, político e institucional para abordar la agenda de clima, apoyando en la elaboración desde los inventarios de emisiones de GEI hasta planes de acción climática y proyectos financiables.

 

En una entrevista, los gestores del área de cambio climático de ICLEI América del Sur destacan como el Proyecto Urban LEDS II: Acelerando la acción climática por medio de la promoción de Estrategias de Desarrollo Urbano de Bajo Carbono, está apoyando a gobiernos locales en la elaboración de estrategias de desarrollo sustentable, centrándose en el desafío de la movilización de recursos y en la implementación de planes de acción para la mitigación y adaptación al cambio climático.

 

Según el Gerente de Cambio Climático de ICLEI América del Sur, Igor Albuquerque, para acelerar la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en las ciudades de América del Sur es necesario que las ciudades consigan estructurar planes de acción financiables. «Crear una cartera de proyectos para el cambio climático requiere la creación de un grupo multidisciplinario dentro del municipio, pero a menudo los técnicos están sobrecargados con sus responsabilidades de rutina. Para mejorar esta situación, es necesario un mayor alineamiento técnico y político que permita estructurar proyectos que van a atender a los criterios de los financiadores «, agregó.

 

En su primera fase, Urban LEDS contribuyó a la reducción de 6 millones de toneladas de CO2e en los cuatro países participantes de la primera fase (Brasil, Sudáfrica, India e Indonesia). Ahora, en su segunda fase, el proyecto sumó otros siete gobiernos locales colombianos, además de las ocho brasileñas -ya participantes de la primera fase-, y tendrá como enfoque la profundización en la identificación de fuentes de recursos para que los municipios, que ya tienen sus estrategias de acción definidas, consigan impulsar y ejecutar sus planes de acción climática.

 

«Para iniciar la segunda fase del proyecto hemos realizado una ronda de talleres y seminarios de sensibilización en todas las ciudades participantes. Los seminarios abiertos permitieron que la sociedad se familiarice y entienda la importancia de porque el gobierno municipal o regional invierte en estrategias de desarrollo de bajo carbono, manifestó la Coordinadora de Cambio Climático del ICLEI América del Sur, Camila Chabar. «Los talleres técnicos permitieron entender cuál es el escenario de la ciudad para iniciar la segunda fase e identificar cuáles fueron las dificultades internas y externas de los municipios para que puedan ejecutar esas estrategias», destacó. Las acciones del proyecto en este año impactaron a más de 800 personas, en actividades realizadas en 12 ciudades, y sumando más de 15 asociados, entre bancos y agencias multilaterales de fomento, organizaciones internacionales y redes nacionales de gobiernos locales.

 

La ciudad de Belo Horizonte, por ejemplo, trabajará dos estrategias de desarrollo de bajo carbono: la implementación de paneles solares en las escuelas municipales y de una flota de autobuses eléctricos en la ciudad. «Para la implementación de la flota de autobuses vamos a apoyar a la ciudad a elaborar un proyecto para captación de recursos externos y hacer una evaluación de qué otro mecanismo de financiamiento puede ser implementado. Tal vez pueda ser una Asociación Público-Privada (PPP). Por su parte, el proyecto de paneles solares será trabajado por medio de cooperación entre ciudades», indicó Chabar.

 

En Colombia, el municipio de Envigado, ciudad modelo dentro del Área Metropolitana del Valle del Aburrá, seleccionó un proyecto llamado Ecozonas, que incluye varios sectores. «Este proyecto tiene similitudes con el proyecto de otra ciudad del Urban LEDS, el Parque Capibaribe, en Recife (Brasil), pues trabaja con dos ejes: mitigación y adaptación. En Urban LEDS, intentamos estimular estrategias que integren estos dos frentes para que el ciudadano se beneficie con un esfuerzo financiero y técnico mejor ajustado. Una mirada integrada que va a resultar en múltiples beneficios», agregó Albuquerque.

Sobre el Proyecto Urban LEDS II:

Las actividades humanas en las ciudades contribuyen con una proporción significativa y creciente de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, impulsando la demanda de energía y otros servicios en áreas urbanas con rápido crecimiento poblacional. Las organizaciones ONU-Habitat e ICLEI – Gobiernos Locales por la Sustentabilidad están enfrentando este desafío, acelerando el desarrollo urbano resiliente y de bajo carbono en más de 60 ciudades en todo el mundo, usando un enfoque de gobernanza multinivel para la acción climática urbana.

 

 

Por medio de Urban LEDS, las ciudades desarrollan estrategias integrales de desarrollo de bajo carbono y trabajan juntas para implementar sus planes, desarrollar proyectos piloto y modelos de financiamiento para la implementación de estrategias urbanas de bajo carbono (LEDS). El proyecto fortalece la cooperación y el intercambio de información entre los gobiernos nacionales y locales, posicionando a todos los niveles de gobierno para avanzar, acompañar y cumplir las metas globales de clima y sostenibilidad.

 

 

El proyecto Urban-LEDS II: Acelerando la acción climática a través de la promoción de Estrategias de Desarrollo Urbano de Bajo Carbono es implementado por ICLEI – Gobiernos Locales por la Sostenibilidad y ONU-Hábitat y financiado por la Comisión Europea. En su segunda etapa, el proyecto abarca cuatro nuevos países – Colombia, Ruanda, Laos y Bangladesh-, además de los cuatro países participantes de la primera etapa – Brasil, India, Indonesia y Sudáfrica.

 

 

Con una inversión de 8 millones de euros, el proyecto apoyará aproximadamente a 60 ciudades alrededor del mundo, en la conducción de sus estrategias climáticas alineadas al Acuerdo de París. En América del Sur, 15 gobiernos locales integran el proyecto en esta segunda fase (2017-2021). En Brasil, son: Betim, Belo Horizonte, Curitiba, Fortaleza, Porto Alegre, Río de Janeiro, Recife y Sorocaba, y en Colombia: Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Cartago, Ibagué, Manizales, Santiago de Cali, Tópaga y Valledupar.

 

 

Más información, accediendo a la página web del proyecto: urbanleds.iclei.org/


Vuelve
Compartir